A modo de conclusión
A lo largo de este trayecto pudimos reflexionar acerca de las diferentes formas de vivir la paternidad en relación a los cuidados, y de cómo las formas de organización social muchas veces limitan esta experiencia.
En esta oportunidad hablamos de:
- El mandato de ser proveedor, que supone que los varones cuenten con menos posibilidades de estar presentes en la crianza de sus hijos/as, y sean quienes deban garantizar que no “falte nada”.
- El conjunto de tareas y cuidados “inmateriales” pero muy concretos que hacen al desarrollo de una paternidad comprometida.
- La importancia de hablar sobre las inquietudes, inseguridades y temores sobre la paternidad, reconociendo que nadie puede prever cómo será paternar o maternar, ni qué sentirá al transformarse en padre/madre.